
Presidenta Lanza Programa Estrategico de Alimentos Saludables de Corfo
Con el propósito de duplicar el valor de las exportaciones y posicionar a Chile entre los países referentes en la producción de alimentos saludables a nivel mundial, se lanzó el Programa Estratégico de Alimentos Saludables, impulsado por CORFO a través de su Programa Transforma.
Una de las iniciativas clave del gobierno para transformar su estrategia de crecimiento y mejorar la productividad del país, fue lanzada por la Presidenta Michelle Bachelet junto a los ministros de Economía, Luis Felipe Céspedes; de Agricultura, Carlos Furche; de Salud, Carmen Castillo; y el Vicepresidente de CORFO, Eduardo Bitran.
“Esto es parte de un gran esfuerzo para sentar las bases de una nueva economía más sustentable, productiva y equitativa. En este esfuerzo están involucrados múltiples actores que han contribuido con conocimiento y financiamiento un objetivo común. Creo que esa es la mejor forma para lograr una verdadera transformación productiva”, señaló la Presidenta Michelle Bachelet sobre el Programa Estratégico de Alimentos Saludables impulsado por CORFO.
La iniciativa tiene como principal meta duplicar el valor de las exportaciones de alimentos al año 2025, aprovechando las tendencias de mercado. Por un lado, la alimentación saludable ha generado una creciente demanda de alimentos inocuos, naturales y capaces de contribuir a reducir el riesgo de enfermedades; y por el otro, las condiciones fitosanitarias y agro-climáticas de Chile le dan una ventaja para acceder a un potencial mercado de exportación y convertirse en un referente mundial de esta industria.
“La preocupación de los nuevos consumidores, representan para Chile una enorme oportunidad de posicionarnos como un país que produce alimentos para ese nuevo consumidor. Ese consumidor inteligente, que quiere ingredientes funcionales que le permitan de verdad alimentarse y ser más saludable”, indicó Eduardo Bitran, Vicepresidente de CORFO.
El programa está dirigido a mejorar la propuesta de valor, desarrollando una oferta de alimentos más saludables, sofisticados, sustentables e inocuos, con cadenas logísticas eficientes, de modo de satisfacer en mejor medida las demandas de un consumidor preocupado de su salud y el medio ambiente.
La trazabilidad y visibilidad de las cadenas logísticas son ejes fundamentales para satisfacer las exigencias de los mercados. Para ello, explicó Bitran se requiere “saber de dónde viene el alimento. Tenemos que preocuparnos de la forma en que se usan los pesticidas, el fertilizante, tenemos que introducir industrias inteligentes, internet de las cosas y sensores para poder regular el uso del agua”.
El programa desarrollará una ambiciosa iniciativa de incorporación de Internet de las Cosas a la gestión de los sistemas alimentarios y logísticos, incluyendo por ejemplo la gestión integrada de cuencas y acuíferos, el manejo ambiental y sanitario en la salmonicultura y en la regulación de la actividad pesquera.
Una brecha importante en el sector alimentario es la de capital humano avanzado. No sólo en la producción de materias primas diferenciadas que requieren también sofisticadas tecnologías Smart para lograr óptimas productividades, sino también para la interpretación y evaluación de enormes cantidades de datos que provendrán de sistemas de sensores interconectados y enlazados con las tecnologías de procesos.
Avances del programa
Entre los avances del programa se destaca el proyecto – cofinanciado entre el sector privado y universitario- para la creación de un Centro de Desarrollo para la Industria de Alimentos, CeTA. El centro está liderado por las casas de estudio Universidad de Chile, Pontificia Universidad Católica, Universidad de Talca y Universidad de la Frontera, además de los centros de investigación y desarrollo Fraunhofer Chile Research y Fundación Chile. CeTA contará con capacidades de pilotaje y con una red de servicios para la gestión de proyectos alimentarios y facilitar el acceso de los usuarios a tecnología modernas, administradas bajo un esquema de trabajo colaborativo de los actores claves a nivel nacional.
El Centro abordará el desarrollo de ingredientes y aditivos, alimentos saludables, la valorización de productos patrimoniales y el perfeccionamiento de ámbitos técnicos como el empaque, la inocuidad y la trazabilidad. La iniciativa cuenta con $9.700 millones de financiamiento estatal, los que se complementan con un aporte privado de $7.000 millones, para la ejecución en un periodo de 10 años de operación.
Para incorporar estas tecnologías en el ámbito de las PYME se ha co-financiado un programa de Extensionismo Tecnológico para mejorar la oferta de cientos de empresas del rubro con un costo de $ 1500 millones.
Para la innovación y nuevos emprendimientos, se han dispuesto recursos públicos y privados por un total de $6 mil millones para el desarrollo de nuevos productos, procesos y servicios especializados para la diversificación y sofisticación de la oferta alimentaria.